Pablo Iglesias se recicla por enésima vez

Pablo Iglesias conversa con Quequé en el programa satírico Hora Veintipico.

"Yo ya no tengo responsabilidades políticas y voy a decir lo que pienso". Qué mejor definición de la política en su cara más aberrante y demagógica. Las cosas claras y el chocolate espeso.

Se le podrán crítica muchas cosas a este señor (nada justifica la caza mediática que sufrió) pero no podemos negar su capacidad para reciclarse (y no me refiero al peinado) volver,de un modo u otro, a la escena pública, al menos en lo que al círculo de la "izquierda" se refiere. Profesor de ciencias políticas,diputado,ministro, articulista (escribe si no recuerdo mal en varios portales progresistas),locutor de radio (junto a Margallo y Carmen Calvo) y , ahora, podcaster. Parece que quiere volver a revivir sus mejores años como animal político,los de la Tuerka,cuyos programas me parecieron, al menos los que vi,interesantes,plurales (invitaron a muchos liberales a debatir) y didácticos.

La entrevista se podría resumir en lo siguiente:Vox es una formación de ultraderecha que exalta el terrorismo, Ferreras no lo hace bien invitando a debatir a periodistas como Inda y su ministerio era tan inútil como un bote sin chaleco salvavidas en plena tormenta...Nada que no supiéramos ya,viejos mantras que merecen,creo,mayor altura de miras, una reflexión de mayor sustancia.Pero no olvidemos que la radio quiere lo que quiere...

Al margen de todo ello,siempre es interesante escuchar a uno de las figuras políticas más inteligentes del panorama nacional (el nivel en el congreso no es muy elevado), pese a que uno simpatice con muchas de sus ideas.

Me queda siempre un regusto extraño al escuchar a estos exministros,todos parecen admitir que eran parte de un circo que hizo creer a mucha gente,y de hecho muchos lo siguen creyendo,que ellos harían una política distinta a la de sus predecesores. Parece que,como casi todos los de raza, querían un sillón ,una covachuela y un buen salario público. Algo de fe me queda en la política, pero ya mucho menos...